El desayuno

Como ya os adelante estamos a dieta para perder esos quilos de más y estar más sanos y guapos para nuestro gran día. Empezamos modificando nuestros hábitos de alimentación, ya que no solíamos desayunar y eso está muy MAL. El desayuno se podría considerar una de las ingestas más importantes del día, ya que contribuye a conseguir unos aportes nutricionales más adecuados, equilibrar las ingestas y mejora el rendimiento intelectual, físico y la actitud en el trabajo. 

Un buen desayuno consiste en:

1. Lácteos: 1 vaso de leche, 1 yogur fresco o queso.

2. Cereales: pan, galletas, pan integral, repostería hecha en casa o cereales de desayuno.

3. Frutas o zumo natural.

Mi desayuno a diario consta de 1 kiwi, 1 tostada de pan integral con mantequilla light y una infusión de té verde. No suelo variar el desayuno ya que me resulta muy cómodo y es rápido y fácil de preparar. Además, tiene alto contenido en fibra, la cual es de fácil digestión y sacia bastante. 

Tanto el kiwi como el té verde los elegí por sus grandes propiedades:

El kiwi es rico en vitamina C (dos veces más que un limón), con acción antioxidante. La vitamina C ayuda a reforzar las defensas estimulando la actividad del sistema immunológico y reduciendo así, la intensidad o duración de los resfriados y la gripe.

Contiene actinidina, que facilita la digestión. El kiwi es una fruta rica en fibra y además contiene actinidina, que nos ayuda a digerir las proteínas y, estimula el proceso digestivo. Los kiwis sin la única fruta que contiene actinidina y por eso, son una fruta tan especial.

Alto contenido en fibra, favorece el tránsito intestinal. La clave para aliviar el estreñimiento es mantener una dieta rica en fibra, beber agua con frecuencia y practicar ejercicio. Su aporte calórico es reducido, 57Kcal/100g.

Es fuente natural de ácido fólico y tienen un bajo índice glucémico. Esto significa que el organismo no asimila tan deprisa los hidratos de carbono y la glucosa solo se libera parcialmente en el flujo sanguíneo. De este modo, las grasas se queman con relativa facilidad y se reduce la sensación de hambre. Los productos con un bajo indice glucémico reducen el riesgo de padecer diabetes y afecciones cardíacas.

El kiwi como parte de una alimentación equilibrada, combinado con una ingesta adecuada de líquidos y actividad física, es la clave para evitar digestiones pesadas.

Mientras que el té verde, es un agente de termogénesis: básicamente, esto significa que el té verde tiene capacidades para quemar grasas. Ayuda naturalmente a gastar más energías y esto se traduce en un descenso de peso. Por el sólo hecho de consumir este té, ya contarás con un mayor consumo energético de tu organismo.

Acelera el metabolismo, los polifenoles (sustancias antioxidantes) que se encuentran en el té verde, tendrían un interesante efecto acelerador del metabolismo. Esto ayudaría a que las enzimas digestivas trabajen mejor y, sobre todo, más rápidamente, logrando el consabido efecto adelgazante que tiene el té verde.

Además, es un muy buen diurético, ya que el té verde ayuda a mejorar la diuresis. De esta forma, no sólo se depura el organismo de toxinas acumuladas, sino que ayuda a reducir la hinchazón y a expulsar líquidos retenidos.

Elige un buen desayuno, ya que es clave para una dieta saludable. Besos.